Mapa Forestal de España a escala 1:25.000 (MFE25)

Vista general de un bosque

Una vez finalizado el MFE50, se planteó su revisión y actualización. El proyecto cuenta ya con una periodicidad decenal, por tanto la nueva edición del mapa prevé que se elabore entre los años 2007 y 2017. Continua ejecutándose por provincias que siguen la misma secuencia que en el proyecto anterior de modo que para cada provincia, el periodo transcurrido entre la ejecución de los dos mapas será de 10 años. No obstante, debido a la rápida evolución de las masas de la cornisa cantábrica, está previsto revisar las provincias del norte de España con una periodicidad quinquenal, en lugar de decenal.

La escala para los trabajos se aumenta a 1:25.000. La fotointerpretación y digitalización se realiza sobre ortofotos digitales suministradas por el PNOA (Plan Nacional de Ortofotografía Aérea, cuyo objetivo es obtener la serie de ortofotos para el territorio nacional con una periodicidad de 2 años).

Por otro lado, el modelo de datos del MFE25 es compatible con la asignación de coberturas y usos del suelo definidos en el proyecto SIOSE. (Sistema de Información de Ocupación del Suelo en España).

Paisaje de un bosque con niebla

El MFE25, es la cartografía base del Cuarto Inventario Forestal Nacional, pero también se realiza con el objetivo de ser herramienta útil en actividades diversas de modo que el MFE25 constituya una valiosa herramienta tanto para el sector forestal como para otros posibles usuarios del mismo. En este sentido, el mapa reúne dos cualidades que le dotan de un gran valor; por un lado su carácter periódico lo que permite evaluar los cambios en el tiempo, y por otro, el contar con una metodología común para toda España, lo que permite obtener datos comparables en todo el territorio nacional.

Arbol frutal

Para conseguir el objetivo de ampliar las utilidades del Mapa Forestal de España se incluyen, además de las anteriormente expuestas, otras novedades en el modelo de datos del MFE25; por una parte se enriquecen los parámetros ya estudiados en el MFE50, y por otra se incluyen otros parámetros como modelos de combustible y estudios de vegetación arbustiva. Además, una vez definidas las formaciones arboladas para el MFE50, también se incorporan al MFE25, permitiendo obtener datos según esta clasificación.