Campaña de prevención de incendios forestales. Año 1995
Los primeros años de la década de los noventa fueron especialmente pródigos en incendios forestales, con aumento de la superficie quemada y de las pérdidas humanas y materiales. Por eso en 1994 se decidió dar un giro a la comunicación inaugurando una serie de campañas de fuerte contenido social y crudeza en datos e imágenes que llevaban como título "Todos contra el fuego. Por la cuenta que nos tiene".
Este cambio se advierte ya en el primer spot en el que imágenes en blanco y negro refuerzan conceptualmente la información que la voz en off nos transmite. El spot comienza con una impactante imagen en blanco y negro de un bosque ardiendo a la que acompaña el sonido del crepitar del fuego. El narrador nos dice lo siguiente:
"En el 94 el fuego se cobró 31 muertos- mientras, la imagen muestra la evacuación en camilla de un herido y aparece en pantalla un rótulo con la cifra de 31 muertos- por eso las negligencias, descuidos o imprudencias que originen incendios- la imagen muestra en este momento a un conductor arrojando una colilla por la ventana- se castigarán con fuertes multas y hasta con la cárcel".
Esta última información se nos transmite junto con imágenes que muestran varios momentos del desarrollo de un incendio: la de una zona de matorral ardiendo (en este caso las llamas aparecen en color, frente al resto de la imagen que continúa en blanco y negro) o la de efectivos de la Guardia Civil deteniendo un vehículo, lo cual refuerza la idea del castigo o de la cárcel.
El narrador continúa: "Las Comunidades Autónomas y el Ministerio de Agricultura piden ayuda- y en este caso se nos muestra un avión anfibio, también en color sobre el fondo en blanco y negro, realizando una descarga-. Todos contra el fuego, por la cuenta que nos tiene".
El segundo spot comienza también con imágenes en blanco y negro de un bosque ardiendo mientras una voz en off nos dice:
"Hay dos formas de evitar incendios. Una no podemos pagarla: tener de todo para el peor de los casos. La otra es gratis: no cometer negligencias, descuidos o imprudencias. Se castigarán con fuertes multas y hasta con la cárcel. Las Comunidades Autónomas y el Ministerio de Agricultura piden ayuda: Todos contra el fuego. Por la cuenta que nos tiene".
Al tiempo que el narrador nos transmite el mensaje se suceden varios rótulos con las preocupantes cifras del año anterior:
"Más de 400 000 ha calcinadas"
"Más de 19 000 incendios en España"
"31 muertos"
Sobre una secuencia de imágenes que ejemplifican las conductas adecuadas para prevenir los incendios en el monte y otras que muestran la actuación de los medios aéreos en un incendio.
Destaca la fuerte carga emocional de este spot, en el que aparece una mujer que llora tras haberse producido un incendio y dos hombres que evacúan un cadáver en una camilla.
También es reseñable el empleo del color para resaltar ciertos elementos clave sobre la imagen en blanco y negro: la colilla que el conductor decide no arrojar por la ventanilla del coche, una pradera de color verde intenso en la que un grupo de personas recogen residuos, un rescoldo sobre el que alguien vierte un cubo de agua y un helicóptero de extinción realizando una descarga.
El tercer spot comienza de nuevo mostrando al espectador imágenes de un incendio forestal mientras el narrador dice:
"En el 94 una extensión como toda una provincia quedó totalmente calcinada". Mientras, se muestran imágenes de un monte arrasado por el fuego y aparece en la parte inferior de la pantalla el texto:
"Más de 400 000 ha calcinadas"
"Por eso las negligencias, descuidos o imprudencias- continúa el narrador- que originen incendios se castigarán con fuertes multas y hasta con la cárcel" - en este caso sigue mostrándonos detalles del desarrollo del incendio, incluyendo la evacuación de un hombre afectado y la imagen de una mujer sollozando con una niña en brazos- ."Las Comunidades Autónomas y el Ministerio de Agricultura piden ayuda: Todos contra el fuego. Por la cuenta que nos tiene".
Al tiempo que el narrador nos transmite esta última información la imagen muestra a efectivos de la Guardia Civil trabajando en un incendio y varios medios aéreos realizando labores de extinción. Una vez más, los elementos importantes para reforzar el mensaje, como las llamas o los aviones de extinción, se muestran en color.
El cuarto spot es muy semejante a los anteriores. El narrador vuelve a referirse a lo acontecido en el año anterior, con el siguiente texto:
"En el 94 ninguna Comunidad Autónoma se libró del fuego. Por eso las negligencias, descuidos o imprudencias que originen incendios se castigarán con fuertes multas y hasta con la cárcel. Las Comunidades Autónomas y el Ministerio de Agricultura piden ayuda: Todos contra el fuego. Por la cuenta que nos tiene".
Este mensaje se refuerza con los siguientes rótulos que aparecen en la parte inferior de la pantalla:
"Más de 19 000 incendios en toda España"
"Más de 400 000 hectáreas calcinadas"
"31 muertos"
Una vez más se alternan tomas aéreas de incendios forestales con tomas de detalle que reflejan distintos momentos de la tragedia (planos de los llantos de los afectados o de la evacuación de un fallecido, imágenes de los medios humanos y materiales que actúan en la extinción).
En este año se rodó también un publirreportaje. La información que nos transmite el narrador se ve de nuevo reforzada con imágenes en blanco y negro en las que algunos de sus elementos aparecen resaltados en color. Se trata de imágenes de montes devorados por las llamas (en este caso se incluyen un par de imágenes en las que los incendios no sólo afectan al monte, sino también a poblaciones), de conductas adecuadas e inadecuadas para evitar que se produzcan incendios forestales, de personas que, en mitad de un incendio, muestran su desolación, de medios humanos y materiales dedicados a la lucha contra incendios y de parajes naturales y especies de flora y fauna silvestre.
De nuevo aparecen, en forma de rótulo en la parte inferior de la pantalla, las cifras resumen de las consecuencias de los incendios forestales de la campaña anterior, consiguiendo que se fijen más en la memoria del espectador.
La información que se transmite al espectador es la siguiente:
"En el 94 España ardió por los cuatro costados: ni una sola de las diecisiete Comunidades Autónomas se salvó de la quema. Los incendios amenazaron pueblos, calcinaron tierras, arruinaron cosechas y hasta segaron vidas. Los responsables de la lucha contra incendios han movilizado todos sus recursos tanto humanos como materiales para prevenir y sofocar incendios y además reforestar las zonas afectadas para prevenir la desertización de España. Todos estos recursos no han podido impedir que el año pasado se produjeran en España más de 19 000 incendios pero, aunque se ampliasen estos recursos, no se conseguirían mejores resultados porque, para evitar incendios, la única solución, y además gratis, la tenemos en nuestras manos. Si todos fuésemos conscientes del grave riesgo que supone encender un fuego, tirar una colilla mal apagada, arrojar basura, etcétera, evitaríamos muchísimos incendios. Más del 40% de los incendios se deben a descuidos, con unas consecuencias desastrosas para el medio ambiente, la economía y la vida en general. Para evitar que esto se repita toda persona que por negligencia, descuido o imprudencia origine un incendio será castigada con fuertes multas económicas…y hasta con la cárcel. Esta medida contribuirá a defender los intereses de la gente responsable, la que se preocupa por la calidad de vida, por el medio ambiente y por la herencia que quiere dejar a sus hijos y a los hijos de sus hijos. Una medida que luchará por evitar que se calcinen más de 400 000 hectáreas, una extensión como toda una provincia. Que pretende reducir las cuantiosas pérdidas económicas derivadas de los incendios: 100 000 millones de pesetas. Y que intenta proteger el bien más preciado que tenemos: la vida. El año pasado murieron nada menos que 31 personas. Las Comunidades Autónomas y el Ministerio de Agricultura piden ayuda: Todos contra el fuego. Por la cuenta que nos tiene".
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