Las instalaciones convierten la energía, que proporciona el sol a través de la radiación solar, en energía eléctrica alterna de 400 V, que se será inyecta directamente en la instalación interior de baja tensión de las EDAR y EBARs., con una potencia pico instalada de 370,15 kWp y potencia nominal en inversores de 450 kW para autoconsumo. De acuerdo con el Real Decreto 244/2019, de 5 de abril, las instalaciones fotovoltaicas pertenecen a la modalidad de suministro con AUTOCONSUMO SIN EXCEDENTES.
Se instalan módulos fotovoltaicos en las cubiertas de los edificios para no ocupar espacio adicional, ubicándose el cuadro eléctrico en planta baja. Estos módulos son los elementos encargados de convertir la energía procedente de la radiación solar en energía eléctrica. La corriente continua así generada se convierte en corriente alterna mediante un equipo inversor, que inyectará la energía eléctrica producida en las instalaciones eléctricas interiores de los centros.
La configuración de los módulos fotovoltaicos está compuesta de módulos monocristalinos. Los módulos se disponen conectados eléctricamente en series o ramales en paralelo (strings), cumpliéndose con esta configuración los rangos de tensión e intensidad máximas de entrada del inversor seleccionado
El módulo fotovoltaico tiene una potencia nominal de 550Wl formado por células monocristalinas PERC (Passivated Emitter Rear Cell) y HC (Half-Cut o Half-Cell)., con una eficiencia mínima de 21.3%., y unas dimensiones aproximadas de 2278x1134x30mm. Estos módulos se conectan a la instalación de puesta a tierra existente en los edificios mediante conductor de cobre de 35 mm2.
Los módulos solares se asientan sobre soportes prefabricados de hormigón o estructura metálica para paneles solares, evitando, en la medida de los posible, perforar la cubierta de los edificios en el que se realice la instalación, afectando los menor posible a la impermeabilización de las cubiertas de los edificios.
Estos soportes prefabricados tienen una inclinación de 15º / 30º sobre la cubierta plana, comprobándose que la carga aplicada total sea menor al valor de carga de cálculo de la estructura. Por tanto, las sobrecargas que va a generar la solución adoptada son permitidas por las edificaciones y no supone ningún tipo de riesgo estructura
Los generadores fotovoltaicos se conectan eléctricamente a los equipos inversores proyectado mediante las correspondientes cajas de conexión, que incorporan equipos de derivación para evitar la posibilidad de rotura del circuito eléctrico en el interior del módulo.
Se disponen varios inversores para recoger la energía generada por los paneles fotovoltaicos.