El papel y el cartón están fabricados principalmente a partir de fibra de celulosa virgen obtenida de especies vegetales o recuperada a partir de papel y cartón usados.
El papel y el cartón están fabricados principalmente a partir de fibra de celulosa virgen obtenida de especies vegetales o recuperada a partir de papel y cartón usados.
El consumo y usos de papel y cartón se ha ido incrementando en los últimos años de forma continua. En España el consumo medio de papel per cápita ha pasado de 116 kilos anuales por habitante a principios de los años noventa a los actuales 176 kilos anuales por habitante (ASPAPEL, 2006).
En España, en el año 2010 se registraron 778.738 Tm de envases ligeros de papel-cartón (incluyendo los brics) adheridos al Sistema integrado de gestión (SIG) de Ecoembes y se recuperaron 646.186 toneladas de residuos de envases de papel y cartón a través del SIG (Fuente: Ecoembes).
Según la composición de los residuos de competencia municipal en España (1996), del I Plan Nacional de Residuos Urbanos, la proporción en peso de papel y cartón contenida en el residuo es del 21% (incluye envases y embalajes y papel gráfico), de manera que es la segunda fracción predominante en los residuos de competencia municipal.
Tipos de elementos de papel-cartón más habituales en los residuos de competencia municipal:
Domicilios |
1. Envases de cartón y papel de alimentos, productos de belleza y limpieza, etc. 2. Papel prensa y papel publicidad que se recibe en los domicilios vía postal o por reparto no solicitado en los buzones (publicidad no nominal). Estos últimos productos publicitarios han experimentado un importante aumento durante los últimos años. 3. Papeles gráficos para notas, impresos, impresión de documentos, etc. |
Actividades comerciales |
1. Papel gráfico en cantidades importantes en las actividades de oficinas y despachos 2. Embalajes de cartón secundarios y terciarios para el transporte y conservación de productos consumibles. 3. Papel publicidad distribuido de forma dinámica o estática por empresas y comercios en vía pública o establecimientos y prensa gratuita distribuida en vía pública la cual ha aparecido y proliferado en este último periodo. 4. Envases de cartón y papel de alimentos y limpieza, etc. en el sector hostelería y restauración. |
Equipamientos y servicios municipales |
1. Papel gráfico en cantidades importantes en las actividades de oficinas y despachos de la administración. 2. Productos de papel gráfico en forma de libros de texto, libretas, folios, etc. en cantidades importantes en las actividades educativas. |
*En todos los ámbitos se generan productos higiénicos y sanitarios para el baño, cocina, limpieza, etc. fabricados a partir de celulosa.
Básicamente se pueden clasificar en cuatro grandes grupos los papeles y cartones que se recuperan en los ámbitos municipales:
- Papel/cartón para envases y embalajes (cajas de cartón ondulado, cajas de cartón estucado, bolsas, sacos, etc.). Este grupo de residuos son gestionados a través del Sistema integrado de gestión/sistema colectivo de responsabilidad ampliada gestionado por Ecoembes, al igual que los envases de ligeros de plástico, metal y cartón para bebidas, y sus productores deben financiar su recuperación una vez se convierten en residuos. Estos envases deben incluir el Punto Verde como identificación de que pertenecen a este sistema. Ver apartado de Sistemas de responsabilidad ampliada del productor >Envases ligeros y papel-cartón.
- Papeles gráficos (papel prensa para periódicos, papeles para la edición de libros, folios, sobres, carpetas, cuadernos…). Aunque no pertenezcan al grupo de los envases y embalajes su gestión se realiza de forma conjunta.
- Papeles higiénicos y sanitarios (papel higiénico, toallitas, pañuelos, papel de cocina, servilletas…).
- Papeles especiales (papeles de seguridad, papel filtro, papel decorativo, papel autoadhesivo, papel metalizado…).
Actualmente existen unas 500 variedades de papeles. A los productos papeleros más habituales listados, hay que añadir otros, como los empleados en elementos de extrema resistencia en componentes del automóvil, fricción en frenos y transmisión, papel electrónico en cables y transformadores de alto voltaje, cartón dieléctrico con efectos aislantes, papel para placas de circuito impreso de ordenadores, etc.
El papel y sobre todo el cartón (no incluye los productos higiénicos y sanitarios y especiales) son residuos con un volumen considerable de densidades variables (Fuente: ARC):
- Papel: entre 40 y 130 kg/m3 y un valor medio de 90 kg/m3
- Cartón: entre 40 y 80 kg/m3 y un valor medio de 50 kg/m3
Este volumen, especialmente para el cartón embalaje, condiciona de forma importante el tipo de receptáculos de recogida, su dotación y los vehículos utilizados. Su frecuencia de generación varía en función de la actividad que lo genera y del nivel de consumo de los productos de papel y cartón.
Los residuos de papel y cartón admitidos en los canales de recogida municipales habituales:
- Periódicos, revistas, publicidad, libretas y cuadernos, sobres, folios, libros, papeles para envolver regalos, etc.
- Cajas y paquetes de cartón (paquetes de cereales, cajas de zapatos, paquetes de tabaco, etc.), envases de papel, hueveras de cartón, embalajes voluminosos de cartón, bolsas de papel, rollos de papel higiénico, etiquetas de la ropa, etc.
No se aceptan en dichos canales de recogida: papel carbón, papel plastificado, celofán, servilletas y papel de cocina usados, papeles sucios, fotografías, cartón para bebidas, etc. Se debe evitar la entrega de espirales, clips, grapas, etc., pues dificultan el proceso de reciclaje y puede reducir la calidad del papel reciclado resultante.
La prevención de la producción de residuos de papel y cartón es prioritaria, pero una vez generado, la recogida separada tiene como objetivo posibilitar su reciclaje de calidad, hecho que comporta un ahorro de energía, emisiones y materias primas, consiguiendo los siguientes beneficios:
- Cierre del ciclo de los residuos de papel y cartón con su reciclaje y posterior utilización para producir nuevos productos papeleros, en substitución de la materia prima de la pasta virgen y, por tanto, reducción de la tala y consumo de árboles. Por cada tonelada de papel reciclado se ahorran 4m3 de madera -de 12 a 14 árboles- (FIDA) y la plantación masiva de especies para la producción de pasta de papel.
- Ahorro energético del 70% en comparación con el procesado de papel a partir de fibras vírgenes. Disminución de la contaminación atmosférica y del agua, debido a la disminución de las emisiones gaseosas en un 74% y en un 35% las emisiones al agua. Ahorro de agua en torno al 80%. Disminución del uso de productos químicos. (Fuente: FIDA y ASPAPEL).
- Reducción sustancial de las cantidades de materiales biodegradables depositadas en vertedero (tanto directamente como contenidos en los rechazos de planta) y, por tanto, reducción de las emisiones de GEI y de las necesidades de espacio en dichas instalaciones (menor degradación del territorio).
- Aumento de la sensibilización ciudadana en relación a la gestión de los residuos y a la protección del medio ambiente. Impacto positivo limitado sobre el empleo con la creación de nuevos puestos de trabajo en el sector de la recogida y tratamiento.
Objetivos de gestión de la normativa y los documentos técnicos:
Objetivos de la Directiva 2008/98/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 19 de noviembre de 2008 sobre los residuos:
- Antes de 2020, deberá aumentarse como mínimo hasta un 50 % global de su peso la preparación para la reutilización y el reciclado de residuos de materiales tales como, al menos, el papel, los metales, el plástico y el vidrio de los residuos domésticos y posiblemente de otros orígenes en la medida en que estos flujos de residuos sean similares a los residuos domésticos.
Objetivos de la Ley 22/2011, de 28 de julio, de residuos y suelos contaminados:
- Antes de 2015 deberá estar establecida una recogida separada para, al menos, los materiales siguientes: papel, metales, plástico y vidrio.
- Antes de 2020, la cantidad de residuos domésticos y comerciales destinados a la preparación para la reutilización y el reciclado para las fracciones de papel, metales, vidrio, plástico, biorresiduos u otras fracciones reciclables deberá alcanzar, en conjunto, como mínimo el 50% en peso.
Objetivos de la Real Decreto 1481/2001, de 27 de diciembre, por el que se regula la eliminación de residuos mediante depósito en vertedero:
- Reducir los residuos de competencia municipal biodegradables destinados a vertedero, respecto a los generados en 1995, hasta un 35%, para el 16/07/2016.
Objetivos del Plan Nacional Integrado de Residuos para el período 2008-2015 (PNIR):
- Garantizar y verificar el cumplimiento de los objetivos legales en materia de reciclado y valorización de residuos de envases.
- Aumentar las tasas de reciclado de los diferentes materiales presentes en los residuos urbanos de origen domiciliario.
Incremento respecto año base 2006 | Kg/hab/año en 2006 | Toneladas en 2015 | kg/hab/año 2015 | |
---|---|---|---|---|
Papel/Cartón procedencia municipal |
80% |
20 |
1.620.000 |
36 |
Recomendaciones de la Estrategia Temática sobre el Uso Sostenible de Recursos Naturales:
- Cierre del ciclo de materiales, usando eficientemente los recursos existentes y cumpliendo con la necesidad de parar la degradación de nuestros sistemas ecológicos por sobreexplotación, volviendo al funcionamiento cíclico que enseña la naturaleza.
Objetivos del Programa Europeo sobre el Cambio Climático:
- Ayudar en el cumplimiento de los objetivos del programa, reduciendo el material biodegradable en vertederos.
Para más información ver apartado Normativa y planificación.
La generación de residuos de papel y cartón ha ido incrementando en los últimos años, en algunos casos como consecuencia de un aumento del consumo en impresión doméstica, oficinas y actividades comerciales, productos embalados, etc. Aunque su recogida separada y su reciclaje obtienen resultados bastante elevados, resulta ser un material con un potencial de prevención importante si se aplican algunas prácticas sencillas y hábitos de consumo responsable de papel en los ámbitos doméstico, oficinas, etc.:
- Optimización de las posibilidades que ofrecen en cada caso los medios electrónicos en la información y comunicación: circulación, envió y consulta de documentos e información por internet, correo electrónico o intranet, uso y almacenaje de archivos y publicaciones digitales, etc.
- Compra y uso responsable del papel con la revisión de gramajes, la reutilización de elementos de papel y cartón, la impresión y copia a dos caras, etc.
- Reutilización de libros de texto mediante un sistema de socialización, o bien, utilización de libros digitales.
- Préstamo o intercambio de libros de lectura y revistas.
- Regulación y control de las actividades de prensa gratuita (puntos de aportación de ejemplares leídos y reutilización).
- Regulación y control de las actividades de publicidad dinámica y no nominal en buzones (limitar las características de los soportes, tasas por el reparto según unidades, adhesivos de no aceptación en los domicilios, adhesión a listas Robinson, etc.).
- Reutilización de otros elementos de papel, como papel de regalo, diarios, etc.
En ámbitos domésticos, comerciales y asimilables a los anteriores, donde se generan residuos de papel y cartón se debe realizar su separación en origen teniendo en cuenta:
1. El papel y cartón envase y embalaje y el papel gráfico, se destinan a los sistemas municipales habilitados para su recogida, aceptando los materiales solicitados que se listan en el apartado de ¿Qué características tiene? y según las condiciones del convenio que cada CCAA o entidad haya firmado con Ecoembes. Esta entidad estima que el papel y cartón envase y embalaje supone un 40% del residuo domiciliario recogido. Ver apartado de de Sistemas de responsabilidad ampliada del productor >Envases ligeros y papel-cartón. Su recogida puede realizarse mediante:
- Contenedores o buzones vía pública (se identifican por su color azul o por algún distintivo con este color, pueden ser de distinta tipología: superficie, soterrados o sistemas neumáticos).
- Recogidas puerta a puerta domiciliarias.
- Puntos limpios.
- Recogidas comerciales o industriales puerta a puerta (algunas actividades económicas disponen de gestores homologados propios que realizan el servicio de recogida). Pueden realizarse con receptáculo (en muchos casos contenedores de dos ruedas) o directamente depositar el residuo en vía pública (plegado y en fardos).
- Recogidas puerta a puerta para la administración pública y equipamientos.
Los residuos de papel y cartón aportados a los sistemas deben ir sin bolsa y es recomendable no arrugarlos ni romperlos para que ocupen el menor espacio posible. Además si se eliminan todo tipo de grapas, clips y objetos similares, se facilita su tratamiento posterior. Los cartones deben ir sin precintos y doblados adecuadamente para reducir su volumen.
Según la modalidad de servicio y su configuración, cada municipio realizará la recogida con una determinada frecuencia: las frecuencias más comunes en zonas urbanas con contenedores en superficie suelen ser de 1 a 3 veces por semana y, los sistemas puerta a puerta actualmente acostumbran a prestar un solo día de recogida.
Para la recogida del papel y cartón en contenedores tipo iglú de plástico o metálicos, se utilizan camiones de caja abierta con grúa-pluma o vehículos recolectores compactadores con grua-pluma ya que es una fracción que puede ser compactada durante la recogida separada.
2. Los productos de papel de higiene y sanitarios, tienen sus propios sistemas:
- el papel higiénico se desecha a través de sanitario,
- las servilletas, papel de cocina sucio y los pañuelos de papel, etc. se puede depositar junto con la fracción orgánica
- el resto de productos de papel que hayan estado en contacto con productos de limpieza deberían depositarse en la fracción Resto.
3. Los papeles especiales en la mayoría de casos no tendrían una gestión específica por lo que se agruparían con la fracción no separada (fracción resto) y en casos determinados podrían destinarse a los puntos limpios.
El papel es un material 100% reciclable. El residuo de papel es un material que puede volver a utilizarse para la fabricación de papel nuevo. El papel y el cartón usado y recogido se transporta a un almacén de un gestor (recuperador) de papel y cartón, donde se clasifica por tipos, se acondiciona, enfarda y se envía a la fábrica papelera.
Básicamente, el residuo de papel tratado entra en la fábrica de papel por cintas transportadoras. Se mezcla con agua en el púlper y se agita. Se separan de las grapas, plásticos de las fibras de papel y se incorporan sustancias tensioactivas con el fin de eliminar la tinta que queda en la superficie del baño. La suspensión de las fibras se somete a un secado sobre una superficie plana, para recuperarlas. Después se las hace pasar por unos rodillos que las aplanan y compactan, saliendo finalmente la lámina de papel reciclado.
El número de veces que se puede reciclar tiene un límite ya que se van perdiendo parte de las fibras que constituyen la pasta, por lo que se añade una pequeña proporción de fibras vírgenes.
Actualmente se consigue un papel reciclado de alta calidad. Diversos productos de papel de uso cotidiano se fabrican básicamente con papel recuperado, tales como el papel prensa o papeles para embalaje. En España, el papel recuperado como materia prima de la industria representa más de 80% del total (ASPAPEL). También se fabrican papeles tissue, cartulinas, papeles de impresión y escritura, papeles de envolver, bolsas, cartones y cartoncillos, etc. Existen además en España empresas que fabrican sillones, mesas, estanterías, elementos de decoración, etc. a partir de cartón reciclado.