Era, por tanto, imprescindible llevar a cabo una serie de actuaciones que, aun permitiendo el uso ordenado de este paraje, condujeran a la recuperación de los diferentes ecosistemas presentes en el mismo. Se trato, en líneas generales de:
-
Ordenar la circulación peatonal con la construcción de pasarelas elevadas sobre la duna
-
Reubicar los aparcamientos.
-
Restringir el acceso a las zonas sensibles, acotando en estas zonas el paso de personas y vehículos.
-
Restaurar el relieve del cordón dunar mediante la colocación de captadores de arena de forma transversal a la duna.
-
Eliminar las especies alóctonas no arbóreas que han invadido los cordones dunares, sustituyéndolas por especies propias de estos ecosistemas.
-
Repoblar el cordón dunar con especies autóctonas y proteger las zonas regeneradas.
-
Poner en conocimiento de los ciudadanos el enorme valor ambiental que encierran los ecosistemas dunares.