La cabecera del río Gévalo es un ejemplo representativo de los ríos de baja montaña mediterránea silícea. El régimen hidrológico es pluvial mediterráneo, permanente en un tramo y estacional en otro, sin alteraciones conocidas.
El curso del río, confinado en un tramo y con llanura de inundación un poco más amplia en otros, tiene un trazado que varía entre recto y sinuoso. La litología dominante son las pizarras, areniscas y cuarcitas. Mientras que en los primeros tramos discurre por una amplia vega, con escaso desnivel y con un lecho aluvial o mixto en el que predominan los cantos, en otros tramos se encaja y discurre confinado (estrecho rocoso Los Portalillos) aumentando su pendiente y perdiendo anchura el cauce. La estructura longitudinal se caracteriza por una sucesión de rápidos y remansos en las partes de relieve más suave y rápidos y pozas en las zonas más encajadas.
La vegetación de ribera presenta una alta naturalidad, está representada por loreras bien estructuradas y por fresnedas hidrófilas sudoccidentales o saucedas Salvifolias hercínicas.