Teide: Conservación de la biodiversidad

El Parque Nacional del Teide cuenta con 212 especies de plantas, de las que 58 son endemismos canarios. Actualmente 3 especies se encuentran en peligro de extinción y 12 en situación vulnerable, según el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas. Para muchas especies endémicas, las paredes y piedemontes de las Cañadas constituyen un refugio, destacando el vistoso tajinaste rojo (Echium wildpretii), el rosal del guanche (Bencomia exstipulata), cuya población no sobrepasa los 50 ejemplares, la jara de Las Cañadas (Cistus osbaeckiaefolius) y la exclusiva y escasa Helianthemum juliae. Por encima de los 2.400 m de altitud crece la joya del Parque, la delicada y frágil violeta del Teide (Viola cheiranthyfolia). Es de las pocas plantas que vive en la cumbre, en lugares donde muy pocas pueden hacerlo, siendo además una de las que florece a mayor altitud de todo el territorio nacional.

Como respuesta a las numerosas amenazas que sufre esta flora (influencia humana, especies introducidas), a partir de 1981 se redactan los Planes Sectoriales de Recuperación en los Parques Nacionales del Teide, Garajonay y Caldera de Taburiente. Estos planes tratan de coordinar las diversas actividades que pueden llevarse a cabo para recuperar las poblaciones de estas plantas: colecta de semillas, semilleros masivos en vivero, experiencias de germinación en laboratorio, restituciones, análisis de la estructura, dinámica y genética de poblaciones.