Reserva Natural Fluvial de Río Ancares

La Reserva Natural Fluvial del Río Ancares es representativa de los ríos de montaña húmeda silícea, así como de los pequeños ejes cántabro-atlánticos silíceo. La reserva tiene un régimen hidrológico con origen pluvio-nival y de carácter permanente, mostrando un alto grado de naturalidad. 

El río Ancares y sus afluentes discurren mayoritariamente por un valle con llanura de inundación estrecha y discontinua. En el tramo de cabecera, el río se comporta como un arroyo de montaña natural, con una pendiente. En la parte intermedia, transcurre por un fondo de valle encajonado entre roca madre que le permite mantener su estado más natural. En la parte final se alternan las zonas encajadas con las zonas fluviales más anchas. 

Su sistema fluvial constituye un hábitat potencial de múltiples especies, siendo especialmente valioso por la rica y variada ictiofauna que alberga, como la trucha (Salmo trutta), la boga del Duero (Pseudochondrostoma duriense), la bermejuela (Achondrostoma arcasii) y el bordallo (Squalius carolitertii). 

En definitiva, el tramo muestra una importante representatividad y mantiene un estado con presiones antrópicas poco significativas, que conforma un paisaje fluvial de gran belleza y singularidad hidrogeomorfológica.

Mapa detalle Reserva Natural Fluvial de Río Ancares