Aparatos eléctricos y electrónicos

¿Cómo puede prevenirse la generación de RAEE?

Aparatos eléctricos y electrónicos

El capítulo III del Real Decreto 110/2015 que regula la prevención de la generación de RAEE en la misma línea trazada por la Directiva RAEE2 pone el acento en la importancia de evitar nuevos residuos mediante la prevención de su generación y el alargamiento de su vida útil.

 
Las administraciones públicas fomentarán la prevención de RAEE mediante campañas de información y sensibilización orientadas a evitar su generación, incidiendo en el consumo responsable de AEE, en la prolongación de su vida útil y en su reutilización.

Los usuarios de AEE domésticos y profesionales, cuando sea posible, destinarán los aparatos usados a un segundo uso mediante su entrega a entidades sociales sin ánimo de lucro, a instalaciones dedicadas al mercado de segunda mano o a otras vías de entrega para su reutilización y alargamiento de la vida útil.

En el caso de que exista una comercialización del aparato usado, ésta se acreditará a través de un documento, como una factura formalizada, que acompañe al AEE y que pudiera identificar al comprador y al vendedor, y será de aplicación la normativa vigente en materia de comercio interior, en particular la Ley 7/1996, de 15 de enero, de Ordenación del Comercio Minorista, y el texto refundido de la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios y otras leyes complementarias, aprobado por Real Decreto Legislativo 1/2007, de 16 de noviembre.

 
Cuando no proceda la entrega de aparatos usados a un segundo uso porque el AEE resulta inutilizable, por falta de componentes esenciales  o por daños estructurales difícilmente reparable, entre otras causas, los usuarios de AEE deberán entregarlos como RAEE siguiendo las previsiones del Real Decreto 110/2015.

La constante innovación tecnológica y la sustitución de AEE por otros más avanzados y con nuevas prestaciones, sumado a la cultura de usar y tirar, provoca que año tras año se generen cada vez más cantidad de residuos de este tipo. Sin embargo, la reutilización de los AEE usados (de forma directa o después de aplicar actividades de preparación para la reutilización) supone el aumento en la vida media del aparato, un ahorro de recursos, una reducción de la cantidad de residuos generados, una forma de consumo responsable y un nicho de nuevos empleos que supone un importante aliciente social y empresarial. Asimismo, se ponen en el mercado equipos de segunda mano más baratos que pueden hacer más asequible su compra, de manera que puedan ser adquiridos más fácilmente. (Ver esquema del ciclo de gestión de los RAEE).

Por su parte los productores de RAEE, según el Real Decreto 110/2015 (art. 6 y 7) deben diseñar y producir sus aparatos de forma que se prolongue en lo posible su vida útil, facilitando entre otras cosas, su reutilización, desmontaje y reparación, y como mínimo, deberán aplicar las previsiones del Real Decreto 187/2011, de 18 de febrero, relativo al establecimiento de requisitos de diseño ecológico aplicables a los productos relacionados con la energía, y del Real Decreto 219/2013, de 22 de marzo, sobre restricciones a la utilización de determinadas sustancias peligrosas en aparatos eléctricos y electrónicos.


Los productores de AEE elaborarán planes de prevención de RAEE trienales en los que incorporarán sus medidas de prevención.