Mujeres, economía solidaria y consumo responsable

Mujeres, economía solidaria y consumo responsable

Promotor: Centro de Comunicación Voces Nuestras

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Idioma: Español

 

La Organización no Gubernamental Voces Nuestras de Costa Rica trabaja en el ámbito latinoamericano con el objetivo de que las mujeres se apropien de la palabra desde los distintos espacios, ya que para asegurar la protección y respeto de sus derechos humanos es imprescindible el pleno ejercicio de su derecho a la comunicación y a la libertad de expresión e información. El ejercicio amplio y sin restricción de este derecho permite una mayor participación activa de las personas en la denuncia de abusos y en la búsqueda de soluciones que resultan en un mayor respeto a todos los derechos fundamentales de las mujeres.

Para propiciar esta participación, Voces Nuestras convoca desde el año 2002 el concurso Mujeres: voces, imágenes y testimonios, que en su séptima edición (año 2013) se dedicó al tema: economía solidaria y consumo responsable. Participaron 54 trabajos de 9 países de América Latina, realizados por 81 mujeres, la mayoría de forma individual y seis de ellos realizados de forma colectiva. 
 
Estos testimonios se recogen en el libro Mujeres, economía solidaria y consumo responsable, que deja muy claro que en la vida cotidiana, en el día a día, no todas las acciones económicas pasan por el “mercado” donde todo se compra o se vende, y pone en evidencia que hace falta visibilizar más la contribución de las mujeres a la economía y reconocer que aportan nuevos conceptos y acciones que contribuyen a la economía solidaria, al consumo responsable, a la defensa de la vida y de la naturaleza.

Cuando se habla de esta economía que sustenta la vida, estamos hablando de producción y reproducción de la vida y de las condiciones que la hacen posible, hoy y mañana, pero además, de las condiciones que permiten una vida digna, y la satisfacción plena de las necesidades de la humanidad. Pero ello sólo es posible si se considera que la reproducción de la naturaleza debe asegurarse. Y cuando se habla de valorar las condiciones que sustentan la vida, hay que referirse a la producción y reproducción de bienes, servicios, cuidados... que realizan las mujeres y que no necesariamente transitan por el "mercado".

El trabajo y todo lo producido por las mujeres en sus casas, para sus familias, ha sido históricamente desvalorizado porque no entra en el "mercado", porque no se valora en términos monetarios, no es contabilizado y por lo tanto es invisibilizado. Y esto tiene una extensión, si el trabajo de las mujeres no tiene valor, tampoco lo tienen las mujeres.

Por ello, en este libro se recogen las reflexiones de las propias mujeres sobre su participación económica como un paso fundamental en el proceso de valoración del trabajo desde las mismas mujeres y para el resto de la sociedad.

 

Consultado en Agosto de 2020

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