Junio 2015
El Proyecto Desendolla’t, de la Agencia Local de la Energía de Osona (ALEO), es una iniciativa interdisciplinaria de educación ambiental que tiene por objetivo promover la eficiencia y el ahorro energético en los centros de enseñanza públicos de educación infantil y primaria de la Comarca de Osona.
Este proyecto transversal, pionero en Cataluña, que comenzó en 2012 y hoy llega a más de 30 centros educativos, ha ganado el premio de la Décima Semana de la Energía Sostenible de la Unión Europea en la categoría ciudades, comunidades y regiones.
Resultados conseguidos
Desendolla't cuenta con una financiación de unos 35.000 euros anuales y se centra en tres líneas de actuación: ambiental, con el ahorro energético; económica, con el ahorro de dinero; y pedagógica, donde cada centro trabaja con diferente intensidad la formación en el ámbito energético.
El primer año del proyecto se consiguió una media de ahorro energético del 28% en los centros escolares, con un total de ahorro de aproximadamente 150.000 €.
Los datos de dos años indican un ahorro energético en torno al 24% y un ahorro económico acumulado de 280.000 €.
La razón del proyecto
El proyecto nació de la necesidad detectada por la Agencia Local de la Energía de Osona de controlar mejor el consumo y el gasto energético en las escuelas municipales de la comarca. Según datos de la ALEO, educación es la segunda área municipal con más consumo energético en los pueblos de Osona. Este hecho hizo que se planteara la necesidad de trabajar con varios agentes un proyecto de estas características.
Por ello, Desendolla't ha sido promovido por el Consejo Comarcal de Osona, desde los departamentos de Energía y Educación, y ha contado con la colaboración de los ayuntamientos, las escuelas -con el destacado papel del profesorado y las asociaciones de padres y madres- y el apoyo de la Diputación de Barcelona.
El equipo que lleva adelante el proyecto se compone de un coordinador con dedicación exclusiva, técnico superior en Química Ambiental; dos técnicos licenciados en Ciencias Ambientales; y un técnico de educación, licenciado y doctorado en pedagogía.
El trabajo con las escuelas
Desde el primer día que participan en el proyecto, los centros de enseñanza nombran a una persona de referencia que actúa como gestor energético del edificio. A continuación instalan un aparato (Envi-R) que registra telemáticamente el consumo eléctrico y la temperatura del centro las 24 horas del día y los 365 días del año, y que permite evaluar el consumo energético real de las instalaciones.
El ahorro económico conseguido en el primer año ha permitido a las escuelas implementar sistemas de telegestión de la calefacción que se controlan de forma centralizada desde el Consejo. El objetivo es seguir mejorando en el aspecto energético y, sobre todo, mejorar el confort de los usuarios.
Respecto al aspecto pedagógico, cada escuela tiene plena autonomía para decidir el grado de formación sobre temas energéticos que llevará a cabo. Algunas lo han tomado como trabajo transversal mientras que otras sólo hacen sesiones puntuales.
Un elemento destacado es "La maleta pedagógica", un material didáctico destinado a los alumnos de primaria que se entrega a las escuelas participantes, y que establece una serie de actividades a realizar en las aulas.
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