Los organismos de cuenca han desarrollado sistemas de indicadores hidrológicos que permiten en cierta forma, prever situaciones de sequía y valorar la gravedad con que se presentan.
El sistema de indicadores debe ser de carácter hidrológico, es decir, tiene por finalidad caracterizar la sequía hidrológica, pues su interés práctico radica en su funcionalidad como instrumento de ayuda a la toma de decisiones relativas a la gestión de los recursos hídricos de la cuenca.
El esquema metodológico empleado para la selección y análisis de los indicadores es el siguiente:
La aplicación del sistema de indicadores conlleva las siguientes ventajas:
Los sistemas de indicadores están formados por puntos de control distribuidos por los respectivos ámbitos territoriales de los organismos de cuenca que incluyen la siguiente información:
A partir de los valores de los indicadores en los puntos de control, en cada organismo de cuenca se obtienen, por diversos procedimientos de agregación, unos valores medios representativos de cada uno de los sistemas de explotación que conforman su ámbito territorial.
Los indicadores adoptan valores comprendidos entre 0 y 1, correspondiendo los valores bajos a situaciones de sequía y el valor de 0,5 a la situación media.
Mediante la ponderación del valor del indicador en cada zona o sistema (teniendo en cuenta la importancia de la demanda atendida) se obtiene el valor del indicador global.
Estos indicadores clasifican los estados hidrológicos de los sistemas de explotación de recursos hídricos en cuatro categorías:
Nota: Para más información sobre los indicadores hidrológicos consultar el apartado Planes Especiales de Sequía.